"Vuelca la madrugada,
derrotada apenas la noche.
Vierte en el desnudo abierto
una ingenua ternura.
Acaricia los párpados
yacentes e indefensos.
Y llueve puñados de sal
en las heridas.
Vacía sobre el cristal quebrado
que duerme en la cabeza,
un nido de pájaros perdidos.
Y les arroja el peso
vencido y cruel, la sombra
plomiza de los sueños.
Llora lo imposible,
grita muda,
ciega se ahoga,
no avisa del ataque
imparable del miedo.
Resbala entre las dos orillas,
entre tú y yo,
esa realidad que no existe.
Hay un temblor moribundo
que a punto de extinguirse,
quema póstumo
las cuencas de mis ojos.
Y un frío espeso, atroz
que ahorca el valor en la garganta.
El abismo de la noche
me atrae hacia él,
no quiere acabar,
diluirse con la luz del sol.
Se empeña en hacer
perpetuidad de la locura.
Nace el delirio dormido
y pretende bailar con la aurora.
Pero amanece
y sabe que se muere.
Sube el día y el rocío
cae en flores de llanto leve,
sobre las ruinas de este amor
inacabable y hambriento
que llaman vida. "
ktharsis 2014
oscuras palabras para decir sin verse, o sentimientos de los que nadie habla... como un cuaderno oculto, este blog sólo es mi catarsis a través de lo que escribo
jueves, 20 de marzo de 2014
sábado, 8 de marzo de 2014
palidece la luz
“Palidece la luz, se va
extinguiendo, lánguida, en la memoria de las sombras.
Inmóvil la osadía se marchita de nostalgias
a ninguna parte.
Se suicida el corazón, salta en
pedazos.
Arden sus volátiles cenizas por mi cuerpo.
Me dejo morir en la invisible hoguera de la
angustia.
Tirita el alma sobre el altar del
tiempo.
Y un durísimo puñal de oscuridad se
ensaña con dolor sobre mi carne,
vaciando la presencia de la
sangre.
No pretendo, no quiero, no deseo
nada.
Me diluyo en el caudal de la
tragedia.
Huyamos de ese ruido lejano de la
vida
que acelera la necrosis de los
días,
y nos deja el esqueleto de los
sueños.
A veces llega tarde el sol cuando
todo está ya seco.
Y sus rayos acarician un cadáver tendido en el pasto del incendio.
Sobre la muerte su brillo es
inútil.
Volvemos a ser dos partes.
Anda el cielo reclamando lo que
es suyo,
y a la vez la tierra pide a gritos lo que le
pertenece.
La tortura separa tus miembros.
Abre tus entrañas simultáneamente
hacia arriba y hacia abajo,
con la fuerza de un gélido
torrente de nieve.
Te rompes por dentro.
Los ojos restallan látigos de
ceguera.
La retina se ahoga en la
tristeza,
roba en millones de lágrimas
el tesoro perdido de la calma.
Y frígida, cobarde la palabra
desaparece dejándonos desnudos.”
ktharsis 2014
ktharsis 2014
coleccionas dudas
"¡Coleccionas dudas¡
-grita el mundo desde afuera-
Y una cornada de sal
aprieta las cuerdas de la noche,
retuerce el dolor en hondo acecho,
expande el terror por los tejados
y cuelga del mástil tu cabeza.
Huérfano el martirio te calcina,
clava el aguilón del tiempo.
Condena a muerte tus pisadas
y el pánico muerde las sombras.
Niégame los golpes,
hiéreme en silencios.
Hunde tus pies en ruinas,
escapa de tus heladas manos.
Llora por tu alma sola."
ktharsis 2014
-grita el mundo desde afuera-
Y una cornada de sal
aprieta las cuerdas de la noche,
retuerce el dolor en hondo acecho,
expande el terror por los tejados
y cuelga del mástil tu cabeza.
Huérfano el martirio te calcina,
clava el aguilón del tiempo.
Condena a muerte tus pisadas
y el pánico muerde las sombras.
Niégame los golpes,
hiéreme en silencios.
Hunde tus pies en ruinas,
escapa de tus heladas manos.
Llora por tu alma sola."
ktharsis 2014
martes, 25 de febrero de 2014
Urgente y voraz
“Incontenible y fugitiva
es la bohemia voluntad
que arde mis pasos.
Atropellada y dominante.
Urgente y voraz,
hiriente y temeraria,
busca abandonar y asalta
los certeros rieles
de la sensata calma.
Desborda la sangre
en su legítimo uso.
Sigue el pálpito
embestida por la
rabia
del genio salvaje e impaciente,
devorador de fuegos
sinsentido.
Vuelca, se pierde enajenada,
derrama esa costumbre
por los labios abiertos,
la destrucción del miedo
en las corrientes del desgarro.
El poder le
pertenece.
Tiembla en el filo
de una irascible daga
que choca y resbala
en mi garganta.
Que rompe la furia
y la descarga.”
ktharsis 2014
sábado, 22 de febrero de 2014
Rondando mis huesos
“Duermen inflamables
la cortesía,
la bondad de los gigantes,
el buen hacer de los sabios,
la cordura de los hombres.
Duerme en las frutas amargas
del sueño, en la inconsciencia,
la cólera que extiende
corpórea
mi feroz artillería.
Olvido la arrogancia,
los murmullos de la histeria,
la desobediencia irrevocable,
el descubierto rebelde,
la poderosa validez de las razones.
Se estremecen las palabras,
temblando en el choque de mis gritos;
sobresaltan el desprecio,
el desafío y el espanto de mi cuerpo.
A cada golpe de remo sobre el viento,
brota la sangre de mis ojos,
muero de nuevo en el eco del daño,
resucito en la bandera roja
que abriga mis guardias.
Dobla el despertar
la esquina del infierno.
Disipa el azote la
memoria.
despedazando el alma.
La vida jamás nos pertenece.
Huyo de la inquietud de las horas,
para volver al resultado
del dolor irreparable.
Callaré el discurso de venganza,
abordaré un ensayo impredecible
del final absoluto.
Y en un alarde de
capricho
desplegaré las alas de mi dueño.
Colgada en las cenizas del invierno,
prisionera, maniatada,
reducida al vencimiento
del espanto.
Indómito el deseo se encarama
en la traviesa señal del carcelero.
Quiero morir
en el gozo del incendio,
en el cadalso extremo
de mi entrega voluntaria.
Anochece el pensamiento
y mis soldados más temibles
andan ya rondando mis huesos. “
lunes, 17 de febrero de 2014
sobre la flor de acanto
“Extiende la serpiente,
lenta y sinuosa,
su voraz enredadera
sobre la flor del acanto.
Secuestra la razón,
la voluntad y el tiempo.
Y en sensual impulso
de susurro femenino
despierta la vanguardia
recreando sus curvas.
Tu conciencia se quema,
derretida en lengua de caricia.
Y en el perfil de unas manos,
impulsos y bramidos,
húmeda brisa,
evocación del viento
en la pluma de sus dedos.
Recreo entrelazado.
La insumisión alerta.
Se enciende el mar
Despiertan los caballos.
Vibra el calor.
Se tensa el arco
en movimiento.
Vivir dormido,
para morir despierto. “
domingo, 16 de febrero de 2014
oráculo antiguo
“Inocentes,
dóciles, sencillas, amables, transparentes. Bondades abiertas en canales
navegables. Góndolas de realidad para manejarse en las mansas aguas de la vida.
Serias, eruditas, definidas, accesibles, tal vez fueran así antes de caer en desgracia
al conocerme.
Ingenua,
simple, indicativa, terrestre, corta, acontecida y controlada: yo hasta que topé con su destino. Y tuve en la
razón beber de sus encantos.
No podíamos saber que al encontrarnos las
haría mías y me harían suya, y que juntas seríamos subjetivamente locas,
juguetonas y falseadas.
Porque fue vernos
y mezclarnos. Y empezar a corromper silencios. Perdernos en vuelos acrobáticos que no iban a
ninguna parte y eran mundos. Fue vernos y perder. Mis ojos en sus letras. Sus
cargas en mis manos.
Y todo era humo,
inconsistencia, ideas, mente, fantasía.
Solas las
palabras no son nada. Sola yo sin ellas, un vacío.
Juntas: presunción, claves, pronóstico, pistas,
rastros en un mapa, coincidencias, solución y más dudas. Expansión de miedos.
Indómita energía. Correspondencia. Creatividad. Orientación directa y confusa.
Transcurre el
tiempo en paralelo. Me resisto a su llamada, desoyendo al orden coherente.
Barajo una
última vez las palabras con manos temblorosas, tiento mis viejas amigas, como
naipes de un oráculo antiguo e intuido. Las extiendo una a una encima de la
mesa. Y rezo con ellas. Las medito. Las enciendo. Las apago. Me interpreto. Me
transmito. Les cedo mi voluntad sobre el tapete.
Me hablan.
Me quieren, yo
las quiero.”
la resaca
"Subo deprisa la montaña de
escalones.
Huyo subiendo, acalorada, dejándome
atacar por el invierno que sopla en contra de mi paso, que enfría el rostro en mis mejillas, que
despierta y apaga al mismo tiempo.
Acelero, piso firme y ruidosa, hacia
la torre de mi casa. La música, el estruendo, habrá de salvarme del silencio de
los muertos. Más alta, más fuerte. Que deje sordo el valor, la culpa, el remordimiento
y la conciencia. Ya casi no me escucho, ni oigo lo que vienen a decirme…
Consigo llegar hasta arriba.
Consigo llegar hasta arriba.
Disfruto la libertad por un
momento. Las vistas abiertas. Las cadenas rotas. Siento que vuelo.
Puro espejismo del instante.
Apenas llego y ya siento el tirón del amarre que me mata. Mi hijo es un dragón
hambriento de palabras y se ha quedado en la prisión de las mazmorras.
No puedo despegarlo aunque
quisiera. Me aterran las cuerdas, esos lazos invisibles que persiguen y consiguen tenernos maniatados.
La pesadilla existe por mucho que pretenda separarla. Ahora la siento rugir, cómo me alcanza su lengua de fuego sobre el pecho.
La pesadilla existe por mucho que pretenda separarla. Ahora la siento rugir, cómo me alcanza su lengua de fuego sobre el pecho.
De nada sirve esta huida. Tras el
viento de popa que llenó mis velas de oleaje, la resaca empuja de contrario, tirando de mí.
Y vuelvo a caer colina abajo.”
ktharsis 2014
ktharsis 2014
subo en sonrisas, escalones
“Inquieto que no sabe, sobre el aire
el mundo me amanece.
el mundo me amanece.
La luz sacude el hueco, la locura
de polvo y aprieto incoherente.
de polvo y aprieto incoherente.
Afloja la tensión,
vacía la cabeza y aligera
la pesadez del tiempo en la memoria.
Ordena a la merced del sol
el sueño, el abandono de la suerte
que guarda en los cajones de la culpa.
Con rapidez de viento,
subo en sonrisas, escalones
hacia lo alto de la torre de mi casa.
vacía la cabeza y aligera
la pesadez del tiempo en la memoria.
Ordena a la merced del sol
el sueño, el abandono de la suerte
que guarda en los cajones de la culpa.
Con rapidez de viento,
subo en sonrisas, escalones
hacia lo alto de la torre de mi casa.
Girando recorridos aspirados
después del amarre de cien noches,
como amante de la sombra.
después del amarre de cien noches,
como amante de la sombra.
Vida, tras el encierro
en la mazmorra oscura
del alma, prisionera.
Quiero soltar la mano que me calma,
apagando las velas del infierno.”
en la mazmorra oscura
del alma, prisionera.
Quiero soltar la mano que me calma,
apagando las velas del infierno.”
ktharsis 2014
sábado, 18 de enero de 2014
diversión en lo terrible
“Con esa estética expresión de
los poetas, que nombran, testifican y condenan en sus verbos de colores igual interferencias,
que dramas e historias, yo habito en las palabras dulces y tristes, en los
vocablos valientes del sentimiento que ni
falso ni real, sólo sirve imaginado.
En esos márgenes cerrados de los
sueños prohibidos y extraños, donde amo, encuentro y borro un aire constante, despistado y
tremendo. Ajeno a la verdad, ajeno al mundo.
Consumo exagerada diversión en lo
terrible, meciéndome en la fábrica de un timbre que me invento. Acento
exagerado. Pasión por los deseos, por el oscuro amarre que nos condena a ellos.
Sonido de cadenas. Memorias de
fantasmas.
Propensión a la conquista de
vuelos, al derrotismo de los suelos del infierno. Recurso de titiriteros, magia peligrosa. Chistera
de ilusiones, papeles encontrados, intérprete de nubes. Encantadora de serpientes.
Tapados los ojos, tan abiertos. Aturdimiento
necesario de la lógica. Revolución de premisas. Trastocada de caricias. Alternancia
de mitos. Tribulaciones esquivas. Locuras transitorias.
Y un millón de posibilidades en el camino del
trueno.
Abajo la realidad que es mucho más
sencilla, que es praxis, simplificada, rasurada, plana, tan aburrida...”
viernes, 17 de enero de 2014
caníbal resurrección de huecos
“Centímetros de piel en las solapas,
derroche de páginas abiertas,
el lomo con letras luminosas.
derroche de páginas abiertas,
el lomo con letras luminosas.
Voy despacio en el
dictado de tu libro,
luego acato el soberano y fiel
instinto que me ofreces.
luego acato el soberano y fiel
instinto que me ofreces.
Para acuciar tu lobo y desatarlo,
dejo un rastro meloso
por el opio de mi pecho.
dejo un rastro meloso
por el opio de mi pecho.
Hay un menú del día disponible para el hambre,
un postre en cada cena que enredamos,
mordiscos de amor cosidos a los labios
con agua de coco y carne de membrillo.
un postre en cada cena que enredamos,
mordiscos de amor cosidos a los labios
con agua de coco y carne de membrillo.
Caníbal resurrección de huecos,
selvática y serena mitología del aire.
Osados promontorios,
superficiales y profundos.
selvática y serena mitología del aire.
Osados promontorios,
superficiales y profundos.
Ceremonia turbada, estremecida.
Respiración de vocales.
Sobresaltadas consonantes.
Incendios ajustados.
Respiración de vocales.
Sobresaltadas consonantes.
Incendios ajustados.
Montería de caza mayor.
Pesca con anzuelo.
Regresos, sonoros portazos.
Pesca con anzuelo.
Regresos, sonoros portazos.
Exhalación y sorbos
que agotan el vapor de las heridas.
que agotan el vapor de las heridas.
Subo el cáliz del deseo.
Paseo tu perfil irresistible
por la rueda entretenida de mis manos.
Y tus dedos conquistan la lucidez del instante.
Paseo tu perfil irresistible
por la rueda entretenida de mis manos.
Y tus dedos conquistan la lucidez del instante.
Hundes tu cruzada silenciosa
en la firme cabida de mi cuerpo.
Sondeas el cielo bocabajo.
en la firme cabida de mi cuerpo.
Sondeas el cielo bocabajo.
No te resistas.
Soy capaz de rescatarte esa risa
en el trayecto feliz
que va de tus logros a los míos.
Soy capaz de rescatarte esa risa
en el trayecto feliz
que va de tus logros a los míos.
Y ponerle sello a los rincones que perdiste,
con una legión de besos dulces a tu instancia."
con una legión de besos dulces a tu instancia."
ktharsis 2014
Todo está en su sitio
“Qué vacío el tiempo que no es suyo,
que traslada solamente los minutos y las horas,
la premura de esperarle, mientras duerme desangrando
los zarzales de los cóncavos sonidos del invierno.
que traslada solamente los minutos y las horas,
la premura de esperarle, mientras duerme desangrando
los zarzales de los cóncavos sonidos del invierno.
Qué triste el viento que esconde entre
mis labios
largo y hueco inventario de palabras dulces y añoradas.
Qué extraña comprensión de vida gotea en mi cabeza,
comprometiéndome en lengua bárbara, divina y misteriosa,
el ritmo intuitivo de mis versos sin quererlo.
largo y hueco inventario de palabras dulces y añoradas.
Qué extraña comprensión de vida gotea en mi cabeza,
comprometiéndome en lengua bárbara, divina y misteriosa,
el ritmo intuitivo de mis versos sin quererlo.
No habría yo de enviarle un
traductor de incógnitas, premisas y menciones,
un brindis en copa de mis huesos, un himno oblicuo en paralelo
ni héroes suicidas de causas vacías y aparentes.
un brindis en copa de mis huesos, un himno oblicuo en paralelo
ni héroes suicidas de causas vacías y aparentes.
Nunca preguntó la ingratitud qué significaba
el precio intencionadamente gratis de los besos.
Ni comprendí este iluso garrafón de sentimientos, de arena en los zapatos, de trazas voluntarias,
conmovedora y falsa celebración de absenta.
Ni comprendí este iluso garrafón de sentimientos, de arena en los zapatos, de trazas voluntarias,
conmovedora y falsa celebración de absenta.
Relinchan mis caballos en una nube
escarchada de azufres e inventos.
Soy un confuso faquir sobre un colchón de púas transparentes
como estambres lejanos y risueños,
como mástiles de encanto soterrado
que me invitan a bailar la claridad del paraíso
o el mortal fracaso entre las sombras.
Soy un confuso faquir sobre un colchón de púas transparentes
como estambres lejanos y risueños,
como mástiles de encanto soterrado
que me invitan a bailar la claridad del paraíso
o el mortal fracaso entre las sombras.
Trenzada la expresión de la ausencia con el valor del vino que no bebo,
arden las altas torres de niebla adivinando el sutil engaño que lastima mi voz esta mañana.
arden las altas torres de niebla adivinando el sutil engaño que lastima mi voz esta mañana.
No siento ni respiro
la ocasión que pierde el sol cada vez que él oscurece.
Ebrios los lirios de mis dudas, desaparecen mustios con la tarde.
Ebrios los lirios de mis dudas, desaparecen mustios con la tarde.
Me temo que todo está en su sitio, la amistad, el desencanto y
el mercurio.”
ktharsis 2014
ktharsis 2014
martes, 14 de enero de 2014
vendida la sonrisa
“LLevo ajena la atención,
vendida la sonrisa.
Por párpados,
hojas secas que amontonan
en vacíos mis derrotas.
vendida la sonrisa.
Por párpados,
hojas secas que amontonan
en vacíos mis derrotas.
En el pecho,
un millar de ilusiones
me conspiran, me visten
con levita oscurecida y larga
la ajada voluntad
que aún me respira.
un millar de ilusiones
me conspiran, me visten
con levita oscurecida y larga
la ajada voluntad
que aún me respira.
En la frente
me acompaña perdida
y azulada la tristeza,
una consciencia de paja almidonada
y el espíritu de aquella
vieja estampa demacrada
por el tiempo que arrastra
el olvido de las fuerzas.
me acompaña perdida
y azulada la tristeza,
una consciencia de paja almidonada
y el espíritu de aquella
vieja estampa demacrada
por el tiempo que arrastra
el olvido de las fuerzas.
Ya me basta
con un vencimiento de poderes,
una entrega de cuentas rendidas.
con un vencimiento de poderes,
una entrega de cuentas rendidas.
Me satisface
la mudez y la agonía,
la inapetente cabalgada
de promesas incumplidas,
de desidias y abandonos.
la mudez y la agonía,
la inapetente cabalgada
de promesas incumplidas,
de desidias y abandonos.
Oigo un vocerío
permanente que ajusticia,
borra y resta en mi mirada
el resplandor que antaño
enamoraba el aire.
permanente que ajusticia,
borra y resta en mi mirada
el resplandor que antaño
enamoraba el aire.
Se me falsea la torpeza
y me entretienen los fantasmas.
y me entretienen los fantasmas.
Cualquiera menos yo
puede ver cómo muero cada día,
en la espera de ese asalto voluntario
que me instruya en las artes del infierno.
puede ver cómo muero cada día,
en la espera de ese asalto voluntario
que me instruya en las artes del infierno.
junto a un depósito
de fieles baratijas.”
ktharsis 2014
viernes, 10 de enero de 2014
como si fuera el primer verso
“No hay furia
que esconda esta vergüenza,
que esconda esta vergüenza,
ni posible insomnio que la cure.
A la deriva
en un infierno de palabras,
encallada en la torsión del esperpento
A la deriva
en un infierno de palabras,
encallada en la torsión del esperpento
dije quiero,
pienso luego...
y me perdí en un análisis de letras.
La maleza
macabra de pasiones
mezcló deseos con inconvenientes.
pienso luego...
y me perdí en un análisis de letras.
La maleza
macabra de pasiones
mezcló deseos con inconvenientes.
Un arsenal oscuro y frío,
una explosión de pólvora dorada
que detenga este olor a matadero.
Una humareda densa y redentora
que pueda servirme de escapada,
y en un brusco final inevitable
acabe con la muerte que no era.
una explosión de pólvora dorada
que detenga este olor a matadero.
Una humareda densa y redentora
que pueda servirme de escapada,
y en un brusco final inevitable
acabe con la muerte que no era.
Atraviesa un muro entre dos aguas.
La soledad enfría las lágrimas,
paraliza las ganas mientras lloro
a solas, en voz baja.
La soledad enfría las lágrimas,
paraliza las ganas mientras lloro
a solas, en voz baja.
Confundí los signos,
parecidos.
No hay cimientos en la casa,
vive en pié sólo con silencio
y vuelve a ser recuerdo vagamente,
en el trasiego de los días que has dejado.
No hay cimientos en la casa,
vive en pié sólo con silencio
y vuelve a ser recuerdo vagamente,
en el trasiego de los días que has dejado.
La noche apaga,
y la blanda pizarra de mis dudas
desclava raíces con pavores nuevos.
y la blanda pizarra de mis dudas
desclava raíces con pavores nuevos.
Ácido el espanto se resbala
por tu disposición, que es imposible.
por tu disposición, que es imposible.
Qué poco calienta el sol de esta mañana,
que ha desteñido el azul por los tejados.
Mientras sueña el puente
que el río espera.
Yo no reniego,
ni maldigo los errores.
que ha desteñido el azul por los tejados.
Mientras sueña el puente
que el río espera.
Yo no reniego,
ni maldigo los errores.
Quiero arrancar
la verdad con falsedades.
la verdad con falsedades.
Y en el límite que quede…
escribir como si fuera el primer verso. "
ktharsis 2014
escribir como si fuera el primer verso. "
ktharsis 2014
jueves, 9 de enero de 2014
empecinada y necia
“Empecinada y necia,
absurda y obsesiva,
demente soñadora,
kamikaze de mensajes,
luchadora cuerpo a cuerpo,
amante de las piedras,
suicida empedernida,
incurable en precipicios.
Técnica en quebranto de cadenas,
experta en rito de
escorpiones,
amarga y agresiva,
voluntaria en espirales que destruyen.
Si siento el final trago el veneno
para morir como me gusta,
de mi mano.
Intermitente sufridora entre placeres,
destinada en la luna de imposibles,
tendente al frente abierto, sin remedio,
dispuesta en colonizar con uñas
la tierra inhóspita del miedo.
Aún así me acojo a tu mandato,
para que deje de dar vueltas la rueda,
el manicomio y la tortura.
Yo meteré la
estaca en mi caminoel manicomio y la tortura.
que paralice el aire que me ahoga,
tú deja la azada, que no duela,
y escóndete de mí por si salpico.”
ktharsis 2014
miércoles, 8 de enero de 2014
mi incrédula rotura
“Antiguas mis palabras,
avisaban.
Hechizadas, premonitorias y sabias.
Tendenciosas, ya habían confesado
mi incrédula rotura por encima
del todo de mi vida.
Jugando la emoción con la ternura
en la sonrisa amable
del polvo de la rima,
mucho antes de haber conocido
esa brecha en que hubo herida.
Hechizadas, premonitorias y sabias.
Tendenciosas, ya habían confesado
mi incrédula rotura por encima
del todo de mi vida.
Jugando la emoción con la ternura
en la sonrisa amable
del polvo de la rima,
mucho antes de haber conocido
esa brecha en que hubo herida.
Y el pulso paró
el tiempo de las hadas,
quemándose en la muerte que venía.
el tiempo de las hadas,
quemándose en la muerte que venía.
Como encerrar el agua entre las
rocas
o apuntalar el aire en una grieta.
Amordazar la lluvia en la ventana,
estrechar el cielo en mar abierto.
Imposible negar ya lo evidente.
o apuntalar el aire en una grieta.
Amordazar la lluvia en la ventana,
estrechar el cielo en mar abierto.
Imposible negar ya lo evidente.
De regreso la fiebre comía de mis
ojos,
la tristeza oscurecía y se apagaba
el alma del paisaje, conmovida
por la estancada llanura en que vivías,
dentro de un fugaz presentimiento.
la tristeza oscurecía y se apagaba
el alma del paisaje, conmovida
por la estancada llanura en que vivías,
dentro de un fugaz presentimiento.
Imposible recomendar cordura,
resistirse a la opresión del luto,
recomponer veletas,
como curvar la línea recta en el latido.
resistirse a la opresión del luto,
recomponer veletas,
como curvar la línea recta en el latido.
Imposible amurallar los sentimientos,
sumergidos en los signos del destierro
como un arroyo que olvida sus riberas,
en un cauce profundo y dolorido.”
ktharsis 2014
sumergidos en los signos del destierro
como un arroyo que olvida sus riberas,
en un cauce profundo y dolorido.”
ktharsis 2014
viernes, 3 de enero de 2014
game over, lluvia de cenizas
“Ha caído la noche sobre el
cielo. Se ha desplomado precipitada y abierta. Es un telón inesperado que
paraliza el mundo sin dejar resquicio ni tiempo para escape, matando luces y
certezas con una tala exhaustiva de cirios y recuerdos.
Mi corazón agoniza acorralado debajo de lo que ya no será nunca. Un millón de saetas de fuego llovieron del fondo de la última lumbre que encendimos, arrasando mi vida, reduciéndola a despojos.
Mi corazón agoniza acorralado debajo de lo que ya no será nunca. Un millón de saetas de fuego llovieron del fondo de la última lumbre que encendimos, arrasando mi vida, reduciéndola a despojos.
Ya no escucho nada, salvo el silencio
en mi dolor. Los ojos se me cegaron en la última imagen congelada: tú en mi
sonrisa. Mis manos perdieron su escasa fuerza, el cuerpo no responde a
órdenes, todas revocadas.
Ha hundido su mancha de oscuridad
la muerte. Son las cinco y la destrucción se cierne sobre la umbría quieta de la tarde. Enmohecida, cavernaria,
aniquilada, marchita y menguante. Diminuta y asumida por la tierra, me han
llamado a reposar con los ausentes.
El valle habla entre las sombras
el lenguaje universal del luto. Mi alma ahora es negra y acaba enterrada sine
díe por la maldición estrecha de Dios que me abandona.
Soñé que estaba sentada en el rebate
de las ruinas, en esa anciana mansión enmascarada de las pérdidas. Con tus últimas
palabras por el suelo, encharcadas de vacíos.
En la trastienda del aire temblaba de miedo.
En la trastienda del aire temblaba de miedo.
Y una lluvia de cenizas desprendía
calladamente mi tristeza.”
ktharsis 2014
ktharsis 2014
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